El Gas Natural Licuado (GNL) es gas natural convertido en líquido por enfriamiento a -162°C, lo cual permite reducir su tamaño 600 veces para transportarlo y almacenarlo de forma eficiente.
Es inodoro, incoloro, no tóxico y de muy bajo impacto ambiental.
Tras un proceso denominado regasificación, vuelve a su estado gaseoso para diferentes usos.
El Gas Natural Licuado (GNL) llega a la terminal de regasificación de SPEC LNG en buques metaneros y en una operación barco a barco, es transferido a través de mangueras criogénicas a la Unidad Flotante de Almacenamiento y Regasificación (FSRU, por sus siglas en inglés), acorde a los más altos estándares internacionales marinos.
El GNL se almacena en cuatro tanques localizados al interior de la FSRU, luego se regasifica y se entrega al sistema nacional de transporte de gas natural.